La gente de campo sabe que cada seis años de cosecha debe haber uno de barbecho para que la tierra pueda enriquecerse.
Ferran Adrià abre 7 meses El Bulli y cierra 5. Tiene capacidad para dar de comer a 8.000 personas al año, pero las ideas generadas en ese tiempo de esparcimiento e investigación atraen 2,2 millones de peticiones anuales.
Google ofrece a sus empleados el 20% de su vida laboral en la empresa como “tiempo de uso personal” y no creo que haga falta hablar de los resultados.
Estos son algunos de los argumentos que da el diseñador y artista visual Stefan Sagmeister defendiendo "the power of time off" (el poder del tiempo de retiro). (En inglés. 17’40”)
No he tardado medio segundo en hacerme fan de Stefan Sagmeister después de ver este otro vídeo: “Lo que he aprendido hasta ahora”, que se resume en esta lista:
1. Ayudar a otros me ayuda a mí.
2. Tener huevos siempre me funciona.
3. Pensar que la vida mejorará es estúpido. Tengo que vivir ahora.
4. Montar una organización caritativa es sorprendentemente fácil.
5. No ser fiel a la verdad acaba yendo en contra de uno mismo.
6. Todo lo que hago, vuelve a mí.
7. Dar las cosas por supuestas es agobiante.
8. Las drogas te hacen sentir bien al principio y más tarde te arrastran.
9. Después de un tiempo, te acostumbras a todo y empiezas a dar las cosas por sentadas.
10. El dinero no me hace feliz.
11. Mis sueños no significan nada.
12. Mantener un diario favorece mi desarrollo personal.
13. Intentar parecer bueno limita mi vida.
14. El lujo se disfrutan más en pequeñas dosis.
15. Preocuparse no resuelve nada.
16. Quejarse es tonto. Actúa u olvida.
17. Todo el mundo cree que tiene razón.
18. Si quiero explorar un nuevo camino profesional, antes debo ponerme a prueba a mí mismo.
19. Tener pocas expectativas es una buena estrategia.
20. Todas las personas honestas son interesantes.
Supongo que parar a reflexionar le ha ayudado a ver las cosas desde este ángulo y a llegar a estas conclusiones.
Sin embargo, mucha gente aún cree que quien se toma un año sabático es un vago o sólo quiere descansar, pero “habitualmente no es para no hacer nada, sino para hacer muchas cosas, eso sí, diferentes a la rutina cotidiana”, apunta la psicóloga Macarena Pérez . Ella misma comenta que este tipo de experiencias “mejoran la motivación y el rendimiento” laboral a la vuelta.
En EEUU el 18% de las empresas tienen planes especiales para facilitar a sus empleados el “gap year”, pero la legislación española ni siquiera contempla el año sabático. Sólo existe la posibilidad de acogerse a las excedencias que establece el Estatuto de los Trabajadores, pero en estos casos, la reincorporación a la empresa no está asegurada.
Se recomienda firmar con la empresa un acuerdo privado que tenga un carácter similar al de un contrato de trabajo. Y, tal como está la situación económica, quizá estemos en una buena época para llegar a un buen acuerdo porque, según el dario "Cindo Días", "si la empresa está interesada en la reducción de costes, se puede lograr que pague al menos una parte de la cotización a la Seguridad Social".
¿Habéis tenido algún año sabático?, ¿conocéis a alguien que sí? Os agradecería que compartiérais vuestras impresiones al respecto o invitéis a compartirlas con nosotros a quien haya vivido una experiencia de este tipo.
sábado, 3 de octubre de 2009
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El vídeo es muy interesante. ¿Me ayudas a traducirselo a mi abuela?
ResponderEliminarEstá claro que todo está cambiando, y los sistemas laborales no están al margen.
Kiko, confórmate con que he traducido la lista de cosas que ha aprendido en su vida (menos mal que no son muchas) :-P
ResponderEliminarLa verdad es que el tío habla claro (en todos los sentidos). Su filosofía me parece bastante inspiradora.
Es verdad que hay muchas cosas cambiantes, la pena es que haya otras, como la regulación laboral en este caso, a las que les cuesta bastante moverse con el ritmo de los tiempos.
Muy buen post!
ResponderEliminarLo cierto es que cada vez son más los que tienen esta inquietud y estoy convencido que a medida que haya más ejemplos inspiradores será más la gente que se lo plantee y por tanto las empresas que quieran cuidar (de verdad) a sus trabajadores tendrán que valorar este aspecto en su cultura empresarial.
Yo mientras me quedo con el consejo 19 pero sin caer en el 16.
La verdad, lo del año sabático me parece que es una muestra más de lo retrasados que somos en cuanto a desarrollo personal y profesional en España.
ResponderEliminarY por otro lado, por muy Sagmeister que sea, no entiendo qué autoridad moral tiene un diseñador para dar esta especie de código samurai. Me parecería mucho más interesante un código de Emilio Botín o de Briatore, al menos me reiría. ¿Por qué diseñadores como Sagmeister, Joshua Davis y otros (hay a patadas, tantos como gurus creativos) requieren darse ese rollo mesiánico a base de mantras? ¿Para sentir que influyen sobre más vidas de lo que influyen sus ideas?
Me ha encantado el post...yo lo he estado aplicando en los ultimos meses!!!ya veremos el resultado ahora...inspirador, ayuda a la reflexion y replanteamiento....
ResponderEliminarEstaria genial si mas gente lo aplicara a su vida!!!!
LEYRE
Hola!
ResponderEliminarSoy Barbara. Vivo en Buenos Aires. Este es mi año sabático. Lo tomé sin tener en cuenta todo lo que contás en tu post. Este es el segundo año sabático de mi vida. Tengo 34 años y soy periodista.
La primera vez decidí viajar por Europa. Esta vez decidí quedarme en Buenos aires y montar un proyecto personal.
Es dificil no tener que cumplir con las obligaciones típicas de ir a trabajar, pero es muy últil para conocerse intimamente y descubrir quién es uno y hacia donde quiere ir.
Me gustó mucho tu nota. Gracias!
Cómo que un año sabático¿?¿??¿ y los demás queeeee¿??¿¿? XD
ResponderEliminarbsotessss!! Amm... te invito a nuestro bloggg!
http://doblesblog.blogspot.com/ ...lo intentamos, lo intentamos...
Xcierto ya sabes lo último¿??¿¿?
http://www.esloultimo.com/
http://www.theslogan.com/es_content/index.php?option=com_content&task=view&id=7938&Itemid=1
Yo me tomé un año sabático. En realidad, una excedencia por maternidad de un año, de sabático nada, como dices tú en el post.
ResponderEliminarNo hice nada extraordinario salvo cuidar a mi hijo. Y caminar. Pero ese año me sirvió para mucho. Para darme cuenta de que se puede vivir con menos (durante 12 meses cobre 0 euros). Para poner en orden las tonterías y las prioridades. Para charlar con todo el barrio y conocer a otras personas, también madres y padres recientes, que ahora son mis amigos. Para vivir dos meses en la casa que fue de mi abuela, en Andalucia, y darme cuenta de que yo también podría cambiar de vida si me lo propusiera.
No hice ese año en blanco pensando en reecontrarme a mí misma ni nada parecido, ni para dar lecciones a nadie, no pensaba extraer nada especial de la experiencia. Sólo sentía que me tocaba ser madre y no creativa de publicidad. Y al final sí encontré algo: la publicidad es lo menos importante que hago entre las mil cosas que se pueden hacer en 24h, pero me gusta. Después todo, creo que disfruto más de mi trabajo porque sé que puedo ser otra y sentirme bien. ¿Se puede pedir más a un año sabático?
Joder, Ana. No sabes cuánto me alegro de leer esas palabras. Creo que justo eso es lo que quiere conseguir cualquier persona que piensa en un año sabático: ordenar ideas y reestablecer prioridades. Gracias por compartir tu opinión. ¿Alguien más se ha tomado una temporada de excedencia?
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